TAULA DE NOVELA NEGRA
Esta vez, el encuentro era en L’Escala. Como nom conduzco tuve que pedirle a mi madre que me llevara. Sí, dependo todavía de mi madre, pero es que a ella le encanta. Se fue a la peluquería y todo. Se arregló las uñas y se vistió casi como si fuera de boda.
—No hace falta que te arregles tanto, mamá.
Pero no me hizo caso y acabó por contagiarme su entusiasmo e íbamos las dos super acicaladas en su cochecito automático hasta l’Escala. Una odisea. Las calles del centro son todas peatonales e íbamos nosotras allí callejeando con el coche « ¡que por ahí no cabes!» y así, buscando un lugar para aparcar rezando para que no nos multaran.
Durante la mañana nos recorrimos la Fira e intenté nutrirme de todo ese ambiente: los lectores y los escritores juntos. Es una magia muy especial. Lo siento y lo noto. Es puro amor. Nos contagiamos del entusiasmo de la gente y mientras yo hablaba por los codos con la gente que paseaba y admiraba nuestro trabajo, mi madre paseó y fotografió el mar desde todos los ángulos. Creo que si le hubiera dicho que nos quedábamos a vivir allí, habría aceptado inmediatamente.
La organización del evento nos habría invitado a los autores que participábamos a una comida en el Medusa Lounge y como la Fira de este año tenía como cultura invitada invitada Mallorca, no podía asfaltar en el menú un bacalao con sobrasada y miel acompañado de una conversación muy interesante con una mallorquina que tenía que esforzarse mucho para que la pudiéramos entender. Tengo una mención especial para Violeida y su marido, que nos hicieron sentir, tanto a mi como a mi madre, que estábamos entre amigos. Gracias de corazón.
Tras la maravillosa comida cada uno salido por su lado y nosotras decidimos tomarnos un café tranquilamente frente al mar, cerca del stand de mi editorial por si algún lector quería conocerme o que le firmara un ejemplar.
Se acercaba peligrosamente la hora de mi intervención y, debo reconocer que estaba un tanto nerviosa. Los fantasmas de síndrome del impostor luchan por salir. Hablar en público es algo que cuesta de digerir. Te asaltan miles de preguntas y dudas, crees que vas a quedarte en blanco y que tendrán que venir los servicios de urgencias a reanimarte. Pero no, todo fue maravilloso. Pero me puse firme: un poco de rímel, colorete y al lío.
Os dejo aquí el link del Canal 10 de L’Escala en el que podéis un resumen del evento.
Mi intervención, está en el minuto 2:30.
El público estaba entregado, todos los asistentes escuchaban con atención nuestro interesantísimo debate. Marc Moreno estuvo increíble con sus preguntas magistrales, dándonos la oportunidad de presentar nuestras novelas en un formato muy entretenido y además compartiendo experiencias con nuestros colegas escritores.
De todos me llevo algo muy especial: sus creaciones, así como ellos la mía. Volver a casa con todas ellas me recuerda lo especial que ha sido la jornada. GRACIAS.
Biel Cussó
Violeida Sanchez
Maria Sardans
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